Tras el descanso estival, retomamos la actividad normal. Como sabéis desde hace unos años, todos los viernes en torno a las 20,30 horas realizamos una meditación de los santos evangelios. En un sencillo, pero emotivo acto, a los pies de nuestra madre, corto en duración pero muy amplio en riqueza espiritual. La sensación de encontrarse a los pies de la Señora, con la iglesia en penumbra, creedme que es indescriptible.
El acto, dirigido cada viernes por un hermano distinto, entre los que puedes estar tú, comienza con la lectura y comentario de un pasaje evangélico, que no tiene porque ser el del día en curso, sino aquel que ese hermano considere adecuado, por las circunstancias, o porque simplemente tiene un significado especial para él.
Tras este comentario y reflexión, los allí presentes que así lo desen, realizan las peticiones que en ese momento su corazón les marque, ejemplos tenemos muchos (por .... que está enfermo y se mejore; te agradezco madre que haya aprobado el examen; por mi familia, que se va esta semana de viaje, para que tengan un buen camino, etc.)
Creemos que es un momento muy especial y nos gustaría que nos acompañaras.
La primera oportunidad la tienes este próximo viernes a las 20,30 horas a los pies de nuestra madre. Si no puedes este viernes, no pasa nada, la cita es todas las semanas en el mismo lugar y hora indicada.
Nuestra madre nos está esperando.
Un saludo
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